Actualmente encontramos que el programa funcional judicial acaba resolviéndose en sistemas arquitectónicos complejos, bien sea por una reflexionada ordenación o por su calidad como proyecto.En el caso de la ciudad de la justicia de barcelona y l'hospitalet, la sencillez compositiva entra en diálogo con la correcta ordenación, personalmente, este proyecto sabe compensar a la perfección la calidad del racionalismo arquitectónico con la ordenación urbana. La permeabilidad a nivel urbano y la sutilidad arquitectónica, hace que el proyecto se integre perfectamente a diferentes escalas.
Lo más curioso a nivel general es que la arquitectura judicial actualmente ha sufrido un cambio de registro considerable; es decir, hemos pasado de proyectar una arquitectura imponente y justificada al tratarse de un programa de edificio judicial a hacer de la justicia un referente arquitectónico y emblemático para las ciudades.
En el caso de mi ciudad, santa coloma de gramanet, la construcción de los nuevos juzgados de la ciudad(diseñado por Joan Tarrús), ha supuesto un nuevo referente para la ciudad. Ubicado como puerta de entrada a la ciudad, junto al parque fluvial del Besós, el edificio dota de singular a unas de las entradas más representativas de santa coloma a nivel infraestructural. A nivel de ordenación el proyecto se resuelve con un único volúmen que prioriza la relación con el río Besós colocándose paralelamente a éste. Las vistas son intencionadas con su caracteristico brise-oleil y un sistema maclado resuelve la volumetria del edificio. En este caso el proyecto se queda a una escala inferior que la ciudad judicial, pero la calidad arquitectónica hace del edificio un referente.
