martes, 15 de junio de 2010

22@



El proyecto urbano 22@ es impresionante por su tamaño: engloba a 115 manzanas del Eixample. Intenta a cambiar, renovar y construir una antigua zona industrial excéntrica, la del Poblenou,para creer un nuevo entorno de elevada calidad para trabajar, vivir y aprender, al mismo tiempo que respectando a lo existente, especialmente conservando los edificios patrimoniales. Adaptar la ciudad antigua a las necesidades de nuestros días me parece fundamental, es el objetivo de este proyecto con la transformación de una zona industrial que hoy no tiene más sentido en una nueva zona de innovación diversa incluyendo universidades, centros de investigaciones y equipamientos como viviendas, tiendas y zonas verdes. Planear, re - planear la ciudad es necesario; la ciudad de Barcelona ya tiene sus propios límites topográficos: el mar abajo, la montaña de Collserola arriba, la colina del Montjuic y el delta del Llobregat a la izquierda y la planicie y el delta del Besós a la derecha. Así, la evolución de la ciudad de Barcelona tiene que desarrollarse entre sus “murallas naturales”, no puede y no debe expenderse sin fin; su futuro se juega en la restauración, la rehabilitación del tejido urbano ya existente. Y este proyecto es el ejemplo mismo de esta rehabilitación. Pero, podemos preguntarnos sobre la naturaleza de los edificios y espacios que la componen. Al mismo tiempo que rehabilita una parte de los edificios antiguos notables, el plano 22@ parece ser una competición arquitectural en cual todos los edificios tienen que desmarcarse, que ser singulares. Quizás esta variedad es demostrativa de la nueva Barcelona y la enriquezca, pero la ruptura entre el viejo Barcelona y el 22@ puede desestabilizar. Sin embargo, algunos edificios como lo de la Universidad Pompeu Fabra consigue a mezclar rehabilitación y nuevas construcciones; pero numerosos, demasiado diferentes, no consiguen a dar una sensación de homogeneidad al barrio.

Puedo comparar esta intervención con el nuevo barrio de Bonne en Grenoble. Un poquito en las mismas condiciones, a su escala, Bonne es una antigua cuartel militar de Grenoble. En 2000, el ministerio de la defensa ha tomado la decisión de establecer un programa de ordenación de este sitio. La organización general del proyecto propuesto responde a los objetivos de ordenación de la ciudad, a saber organizar en el espacio la relación entre la función residencial y el desarrollo de las funciones centrales en relación con el hypercentro, especialmente comerciales pero también de equipamientos (escuela, piscina municipal…). La diferencia mayor con Barcelona, es que este barrio se sitúa propiamente en el centro de la ciudad. Como en el barrio 22@, el proyecto conserva y rehabilita una parte de los edificios patrimoniales, aquí reunidos juntos a los alrededores de una plaza central, y cree nuevos edificios de viviendas que se desarrollan a su alrededor. El proyecto también incluye la creación de espacios verdes necesarios a una buena calidad de vida en una ciudad urbana. Los nuevos edificios respectan reglas urbanas instauradas por el plan general, como de alturas… pero siguen muy diferentes y diversos en su aspecto arquitectónico. Por su escala reducida, el proyecto parece formar un conjunto más coherente que en Barcelona aun que la diversidad en la forma de los edificios como en el empleo de sus materiales sigue la misma y pone los mismas problemas de homogeneidad y de sencillo que faltan al barrio 22@.