viernes, 28 de mayo de 2010

Edificios que reavivan la ciudad

Morfológicamente los dos modelos de manzana son muy diferentes; mientras el proyecto de Llinás se abre hacia la calle Ribes, generando una plaza donde se concentra toda la actividad, el proyecto de OAB se encuentra en el interior de una manzana que se encierra en sí misma creando así un ambiente más tranquilo.

Por ello, a mi parecer, aunque los dos proyectos se encuentren en dos manzanas del Eixample, se trata de dos actuaciones con fines diversos y por lo tanto con diferentes resultados. La manzana de Fort Pienc se construyó con el fin de introducir equipamientos en un barrio donde éstos faltaban y con ello crear espacio público que activase la vida del barrio. El Centro de Servicios Sociales de OAB, en cambio, se diseñó con el fin de recuperar el trazado de la antigua carretera Horta y reavivar el espacio público interior de la manzana.

Por lo tanto, se trata de dos proyectos que logran su objetivo y reavivan el espacio de manera diversa. Se trata de dos actuaciones que a mi parecer están muy bien y de las que no se puede decir que una esté mejor que la otra por su morfología y fines diversos ya descritos anteriormente.


Donostia, en cambio, es una ciudad que por su densidad urbana no está dotada de muchos equipamientos. Éstos se reparten por toda la ciudad, pero hay una calle comercial en concreto donde se concentran, entre ellos, varios equipamientos como una biblioteca o el mercado. En dicha calle hay un edificio que concentra la mayoría del comercio de la ciudad con un equipamiento que es el mercado que se sitúa en la planta baja y en la planta sótano. Este edificio atrae a muchos de los habitantes de la ciudad. Siguiendo el eje llegamos a la plaza donde se sitúan la Catedral, una biblioteca y el edificio de Correos.

En conclusión, no se trata de una ciudad donde se concentren muchos equipamientos en un mismo punto, pero sí en un eje principal de la ciudad el cuál es comercial.