Concebida como un proyecto de innumerables facetas, donde la dialéctica de forma y función esta presente, con un peso de suma importancia, con tendencias estratégicas.
En la funcionalidad de proyecto deja claro la “humanidad” y la delicadeza del tratamiento de los distintos usos. Con espacios funcionales, enfatizados en las circulaciones, principalmente en un juzgado, para evitar que no haya encuentros de atrito, por ejemplo entre victima y acusado. Los espacios son más flexibles, se puede tener innumerables asociaciones, también son espacios mas abiertos en su interior, permitiendo que la visión penetre a sitios con carácter burocráticos.
La forma es marcada principalmente por imponentes y estáticas fachadas. La quiebra con la rigidez (posiciones aparentemente de forma aleatoria) ocurre a través de los bloques. Cambia las formas rebuscadas por líneas precisas y sobrias. Un nuevo aspecto. Moderno.
Con una gran carga ideológica levada a cabo, que utiliza la arquitectura como estructura simbólica, la ciudad de la justicia es un proyecto de gran escala que desde todas sus esferas tiene presente la nueva imagen deseada a ser transmitida a la sociedad. Intenta cambiar el concepto para una justicia mas abierta, clara, transparente, integrado, igualitaria, humanizada...