
Tres grandes avenidas interrumpen esta gran malla (Diagonal, Paralelo y Merdiana) las dos últimas que forman 90º entre sí con la misión de poder comunicar el puerto de la ciudad con el exterior, van creando diferentes tipos de manzanas, de chaflanes que añaden valor a la ciudad.

Aunque todo el ensanche tenga las mismas dimensiones vemos que existen zonas muy distintas, como decía antes casi todos los usos caben dentro y si nos fijamos en la zona de pueblo nuevo podemos ver que después de un siglo y medio esta forma de crecimiento es la elegida para seguir creciendo y para terminar la ciudad.
La ciudad de Santa Coloma no es un buen ejemplo para comparar sus ensanches, porque aquí no hay ninguno, durante el gran crecimiento de la ciudad, las prisas y sobretodo la especulación hicieron crecer una ciudad casi sin normas, que iban construyendo edificios en los antiguos caminos. Existen dos zonas de la ciudad que podemos decir que es símil de ensanche, aunque en realidad es un crecimiento ortogonal, donde los servicios públicos son muy escasos y el espacio público muy reducido.
Se trata de un crecimiento donde las manzanas miden 130 m de largo y 60 m de ancho, donde las calles miden apenas 7 m, creando una sección muy oscura. El uso principal es el residencia, donde unas pocas tiendas en las plantas bajas son el único comercio.
