jueves, 18 de marzo de 2010

Red cerrada vs Canal abierto

En la mayoría de las ciudades la red de desagües es cerrada. Sin embargo, los desagües cerrados presentan varios inconvenientes. Son más caros porque requieren excavaciones más profundas, tienen que soportar grandes cargas en las calles que los cubren y además, precisan obras adicionales ya que su construcción requiere técnicas de ingeniería más avanzadas. Aun así, la ventaja principal es que no ocupan espacio en la superficie. Por otra parte, en los canales abiertos es más fácil controlar los defectos de construcción, el deterioro, la cría de mosquitos y la ventilación queda asegurada

En el caso de Barcelona, se han aprovechado estos desagües para crear numerosos depósitos de agua que evitan las inundaciones y que mejoren el medio ambiente evitando que el agua contaminada llegue al mar.






En Ámsterdam también conocida como “La Venecia del norte”, el agua es el elemento fundamental y es que los holandeses han tenido que luchar contra el agua para poder mantener secas unas tierras que en gran parte están por debajo del nivel del mar; pero, poco a poco han ido ganando terreno y volcándose en la actividad marítima para poder subsistir.






En el siglo XII, el mar penetraba directamente en las tierras de área más baja y al retirarse dejaba una capa de fango. Estas tierras empezaron a rodearse con diques que se elaboraban simplemente con tierra amontonada para intentar protegerlas. Poco a poco se fueron creando instrumentos que ayudaban a elevar el agua con molinos… y se empezaron a construir los pólder, territorios rodeados de diques por debajo del nivel del mar, que necesitan una constante evacuación de agua.




En Ámsterdam se utilizan y mantienen canales de desagüe abiertos en buenas condiciones estéticas y sanitarias. Aunque, con el uso de este tipo de desagües se corre el riesgo de que niños o incluso vehículos, caigan en el canal.