Los espacios verdes urbanos son a menudo comparados a pulmones de la ciudad. Y por París en Barcelona, gran metrópoli urbana, esta afirmación toma su sentido.
Que falta al parque de Collserolla es lo que hace el parque central de Nou Barris un parque superior y social. El parque de Nou Barris hace literalmente partido de la ciudad, de por su función así como su forma. Y sin embargo el desafío no era fácil, la topografía compleja, devuelve la inserción del proyecto difícil. Es por eso que la utilización de una geometría triangular parece juiciosa. Es una de las formas geométricas más flexibles. Pero es al nivel de su función que el proyecto toma todo su sentido.
Este proyecto ha sido concebido en el seno del vacío residual que subsistió después de la construcción de hábitates durante los años 60 y 70, una ola de construcción maciza en la ciudad de Barcelona hecha sobre tierras que eran entonces sólo unas tierras agrícolas.
Se trata entonces de crear un lazo indisociable entra el edificado y el parque, conceder las escalas entre espacios públicos y privados, recrear conexiones en el seno de una estructura urbana entonces muy cobarde.
La plaza de Virrei Amat se hace un espacio abierto, propicio a los encuentros y las reuniones de barrio, una superficie mineral hecha ladrillos granito y de planes de agua, de áreas de juegos y de diferentes niveles. Este sitio dialoga con entorno dinámico que lo bordea, dos ejes anchos de circulación, nudos verdaderos y urbanos en el corazón del barrio. Las organizaciones son unos puntos de llamada desde el exterior, tales las fuentes y la gran pérgola que responden a las perspectivas desde las calles y a la escala de edificado bordeando el sitio.
Los parques tiene París casi fecha todos del siglo 19, en el momento de los grandes trabajos del barón Hausmann, bajo la dirección de Jean-Charles Alphand. Los parques, más tradicional que Nou Barris, ya que de una otra época, dan en París los espacios verdes cuyo vitalement tenía necesidad. Otro parque en París más reciente es el de Vilette realizado por Bernard Tshumi, Su idea un poco como en Nou Barris es crear un paseo cinemático que pone de manifiesto jardines a tema que son tantas áreas de juegos, de teatros donde la naturaleza está puesta en escena. Una "galería" rectilínea cubierta de un tejado en forma de onda hace el enlace entre el norte y el sur. El parque es fuertemente puntuado por una trama sistemática de edificios rojos llamados "Locuras".